Ingredientes (4 personas)
1 cebolla
1 diente de ajo
1 zanahoria
8 setas Shitake (frescas o secas)
2 alcachofas
8 tomates secos
1 vaso de vino blanco
1 vaso de vino blanco
1 trufa negra
1,5 l de caldo de verduras
150 g de queso gruyère
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Elaboración
- Lo primero que tenemos que hacer es poner a remojo los tomates secos y las shitake si las hemos comprado secas. Deberán estar en agua tibia como mínimo 1 hora.
- Mientras, pelamos la cebolla, el ajo y la zanahoria y lo picamos todo muy finamente.
- Lo ponemos a rehogar con un poco de aceite en una sartén grande, en la misma que vayamos a hacer el risotto. Puede ser una cazuela baja y amplia. Lo dejamos que se vaya pochando a fuego lento. Añadimos un poco de sal.
- Pelamos y cortamos en láminas finas las alcachofas. Si no las vamos a utilizar todavía las ponemos en un bol con agua y perejil picado para que no se pongan negras. El perejil es mejor que el limón porque no le da ese sabor ácido.
- Una vez hidratados, cortamos las setas y los tomates en tiras finas.
- Añadimos las setas, los tomates y las alcachofas al sofrito y lo damos unas vueltas.
- Incorporamos el arroz y removemos un minuto. Añadimos un poco de sal.
- Incorporamos también un vaso de vino blanco y dejamos que el alcohol se evapore.
- Vamos añadiendo el caldo por cazos, 2 o 3 cazos cada vez, cuando lo haya absorbido añadimos más. Removemos de vez en cuando, y cuando el arroz esté cocido, sin dejar que absorba la última ración de caldo añadimos el queso rallado y la trufa rallada en el momento. Damos unas vueltas hasta que el queso se funda y retiramos del fuego.
- Emplatamos y decoramos con más trufa rallada.
