Dificultad media
Ingredientes (20-24 panellets)
Para los panellets
50 g de mantequilla
65 g de harina
500 ml de leche
300 g de queso azul
400 g de pipas de girasol crudas
1 huevo
Sal y pimienta
Aceite de oliva para freír
Para la mermelada
225 g de pimiento rojo
90 g de azúcar
Aceite de oliva
3 bayas de pimienta negra
Elaboración
- Preparamos una bechamel espesa con la mantequilla, la harina y la leche. Salpimentamos ligeramente porque el queso azul ya aporta mucho sabor.
- Añadimos el queso azul desmenuzado y removemos hasta que se funda. Tapamos con film y dejamos enfriar en la nevera mínimo 30 minutos. Podemos meterlo al congelador para ir más rápido.
- Mientras se enfría lo anterior, cortamos los pimientos a mini-brunoise, o sea, en cuadraditos muy pequeños. Esto es lo más laborioso, pero con un poco de paciencia se consigue.
- En un cazo con 4 o 5 cucharadas de aceite se rehoga el pimiento a fuego medio durante 5 minutos.
- Luego añadimos el azúcar y la pimienta y dejamos cocer removiendo de vez en cuando hasta que se consiga la textura de mermelada (aprox. 25 min.)
- Empezamos a formar bolas con la masa que teníamos en la nevera, las pasamos por el huevo batido y las rebozamos con la pipas de girasol. Así hacemos con toda la masa.
- En una sartén, cazo o freidora, ponéis bastante cantidad de aceite (lo ideal es que los panellets queden cubiertos) y cuando esté muy caliente comenzamos a freirlos, dos o tres cada vez para que el aceite esté siempre a la misma temperatura. Cuando estén dorados los sacamos y dejamos escurrir sobre papel absorbente.
- Servimos acompañados con la mermelada de pimientos.